En Xcaret hay mucho por ver y por hacer, en su aire puede sentirse la cultura mexicana, además se goza de una gran diversidad de naturaleza, animales y vida marina.

Al entrar al parque el primer show que vimos fue el de los hombres voladores de Papantla, es un show que muestra una de las tradiciones más antigua y populares de Veracruz, la cual ha permanecido luego de la conquista de los españoles. Esta danza se hace en honor al dios del sol y al dios de la lluvia, en esta, los hombres pájaros como los llaman, escalan un palo largo de aproximadamente unos 20 o 25 metros de alto, y se lanzan desde la punta en dirección a la salida del sol y la rotación de la tierra, los cuatro hombres que se lanzan simbolizan los cuatro elementos, agua, tierra, fuego y aire. En mi opinión es una de las mejores representaciones culturales que tiene el parque ya que es innata.

La capilla San Francisco de Asís se encuentra junto a la hacienda henequenera, fue construida en el parque en el año de 1998, inspirada en una antigua antes construida en el siglo XVI. Está edificada en una de las más antiguas colonias de la península de Yucatán llamada Polé, todo está hecho de materiales locales; en la capilla generalmente, se celebran bautizos, matrimonios y diferentes ceremonias. Como símbolo católico, esta capilla está dedicada a San Francisco de Asís, como muestra de agradecimiento a su enseñanza del cuidado de las plantas y los animales. En el segundo piso de la hacienda, hay un balcón que da a la capilla y permite observarla perfectamente.

Para el cierre del parque, Xcaret presenta un show llamado México espectacular, este es una muestra cultural realmente emotiva que cuenta la historia de México. Durante el show se hacen diferentes tipos de presentaciones, que brindan una excelente muestra del folclor mexicano, muy recomendado para los latinoamericanos, ya que se identificarán con mucho de lo que aquí se presenta.

Para mí, una de las partes más hermosas fue el momento en el que todo el público en medio de la oscuridad, enciende una vela como símbolo de protección a cada una de las almas de los visitantes del parque.