Se dice que el amor se demuestra con hechos y no con palabras, hechos de los que muchas veces no nos damos cuenta. Además, la importancia de un “te quiero”, es una expresión de afecto que no siempre se espera de la pareja.

Surgen entonces interrogantes de la cantidad de palabras de amor en el mundo, expresiones cargadas de promesas y declaraciones; muestras de amor que nos hagan sentir protegidos del miedo a la pérdida por medio que una palabra: amor.

Cuando en una relación ha demostraciones de afecto, pero nos hay palabras, se siente que en la relación falta algo. Y es entonces cuándo se tiene que ver, como administrar los sentimientos para no asustar o agobiar al otro, sin necesidad de barreras, o reprimiendo emociones, que muchas veces llevan a considerar esta forma de actuar válida.

Siempre se espera que al decir te quiero nos den una respuesta igual, ya que estamos expresando nuestros sentimientos a la persona que se lo decimos. Sin embargo, no tiene que ser un te quiero: también un mi amor, cariño, me siento feliz contigo, u otro tipo de palabras que pueden ser remplazadas por un te quiero.

Es posible que, si estás leyendo esto, es porque en tu relación uno de los dos es poco expresivo y estás pensando si puedes cambiar este aspecto en tu pareja o en tu relación. En realidad, lo que debemos hacer es definir si la expresión emocional es negociable: ya que todos pueden cambiar, adaptarse y amoldarse dentro de unos términos justos, donde lo principal es saber trazar una marca entre el respeto a la forma de ser de nuestra pareja y el respeto a uno mismo, el cual no es menos importante.

Las expresiones emocionales, se puede aprender con el tiempo y al ritmo de cada persona, ya que no es un esfuerzo que se deba hacer, si realmente hay amor y cariño por parte de la pareja. Solo se trata de realizar pequeños cambios diariamente con un poco de empatía, esto no significa hacer un gran cambio de personalidad, ni cambiar del amor mutuo a la meloseria absoluta, de lo que se trata es de mostrar que lo que sientes y quieres, unas palabras cariñosas de alguien que te ama, esto no es algo disparatado o inalcanzable, recordemos que una pareja es un diálogo y no dos monólogos, ambos tienen derecho a decir lo que piensan, sienten o necesitan y si hay desacuerdo, poder buscar una solución satisfactoria para ambos.

Muchas veces no nos damos cuenta que brindar felicidad a otra persona es fácil, y que con un poco de nuestra parte, podemos tener una relación bonita, tranquila y satisfactoria, que logra sacarnos de la zona de confort, motivándonos a salir de costumbres cerradas y a abrirnos a cosas nuevas. Pierde el miedo a hablar con tu pareja y expresa lo que sientes, aquello que te hace y no te hace feliz.